El Partido Popular ha denunciado hoy que el despliegue de la fibra óptica en Liébana deja fuera a los pequeños núcleos de población, lo que supone "una desigualdad inadmisible", y ha exigido al Gobierno de Cantabria PRC-PSOE la extensión del proyecto a toda la comarca, sin exclusiones.
La presidenta del Partido Popular de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha hecho esta denuncia en el transcurso de una visita a Liebana acompañada por los alcaldes y portavoces municipales en la comarca, con los que ha compartido su preocupación por el desarrollo de este proyecto y ha coincidido en que extender la banda ancha también a zonas rurales con escasa población y remotas es "un objetivo irrenunciable".
Según Buruaga, es una realidad que la banda ancha llegará a Liébana, un hecho que el Partido Popular celebra, pero cubrir la población no significa cubrir el territorio y "lo cierto es que no llega a toda la comarca por igual, porque excluye a los pequeños núcleos de población".
De hecho, se han excluido del proyecto los municipios de Pesaguero y Tresviso, casi todo el territorio de Vega de Liébana y la mayoría de Cabezón de Liebana, un hecho que, ha subrayado, impide romper el aislamiento, reducir las distancias físicas y recortar la brecha digital y que hay qu corregir.
"Hacerlo es trabajar por la libertad y la igualdad de los ciudadanos, vivan donde vivan, porque el acceso a un internet de calidad es una puerta a la igualdad de oportunidades", ha señalado.
Buruaga ha afirmado que "la verdadera vocación rural" se demuestra con hechos y éstos dicen que el Gobierno de Cantabria "se desentiende de la Cantabria rural; que no invierte lo suficiente en la digitalización del entorno rural, negando oportunidades de desarrollo a los entornos más vulnerables y despoblados".
"De nada sirve llamar a invertir en las zonas rurales si la Administración pública no genera las condiciones necesarias para hacerlo", ha señalado, en referencia a un entorno facilitador para la inversión empresarial y la transformación de la economía, extendiendo la banda ancha a las zonas rurales de difícil acceso.
Buruaga ha defendido que para arraigar la población al medio rural hay que conectar el territorio y llenarlo de contenido, impulsar el avance de nuevas tecnologías y propiciar fórmulas de financiación pública y privadas, por lo que ha pedido al Gobierno "un verdadero esfuerzo inversor en redes de comunicación, especialmente en el medio rural".
DESFILADERO DE LA HERMIDA
Por otra parte, la dirigente popular ha hecho hincapié en que la Cantabria rural necesita conectividad digital y también física, con el desarrollo de infraestructuras de comunicación que son motor de crecimiento económico y cohesión social.
Pero en Liebana "ni lo uno ni lo otro, porque desde que los socialistas aterrizaron en Moncloa el del Desfiladero de la Hermida se ha convertido en el proyecto de nunca acabar", ha denunciado.
Buruaga y los alcaldes del Partido Popular han mostrado su indignación por el abandono de los trabajos de la primera fase, paralizados y esperando un modificado de proyecto eterno desde hace más de un año.
"En 2019 se paró el reloj y desde entonces todo está empantanado. Hemos cambiado obras en ejecución y proyectos ciertos por parches y actuaciones de emergencia que es lo hay en estos momentos", ha añadido.
Además, han advertido de que si no se termina lo que se había empezado, difícilmente los lebaniegos van a creer que se va a ejecutar la reforma integral cuyo proyecto de ejecución el ministro Abalos se comprometió a licitar en el segundo semestre de 2019. "Ha pasado más de un año y continuamos esperando. A este Gobierno se le agota el tiempo y las excusas", ha afirmado la presidenta del PP, que ha exigido el desbloqueo inmediato del proyecto.
"Estamos ante una nueva tomadura de pelo de un Gobierno socialista de España que ni cumple los plazos, ni respeta los compromisos adquiridos con la comarca y en Liébana llueve sobre mojado", ha afirmado Buruaga, en alusión a la mejora de la carretera de Potes a San Glorio.
Para la presidenta del PP, la obra del desfiladero es "otra prueba evidente del ninguneo a Cantabria de Pedro Sánchez, que va de engaño en engaño, burla todos los compromisos con la región y la despacha como una comunidad de segunda". "El daño que Sanchez está causando a los cántabros es real y puede ir a peor con la complicidad de los regionalistas", ha concluido.
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