10 Lugares que visitar cerca de Santander en 2024

En cada rincón de Santander aguarda una nueva sorpresa, ya que esta ciudad costera deslumbra con su diversidad de sitios para visitar
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Ubicada estratégicamente a orillas del majestuoso mar Cantábrico, Santander se erige como una ciudad moderna y distinguida.

Su posición en una amplia bahía la convierte en un destino ideal para aquellos que buscan explorar encantadoras playas y sumergirse en la atmósfera acogedora de su centro histórico.

  1. Playas de la Costa Quebrada
  2. Monte La Picota
  3. Monte de Peñacabarga
  4. Playa del Puntal 
  5. Playa de Langre
  6. Santillana del Mar y el Museo de la Cueva de Altamira
  7. Cuevas de Puente Viesgo
  8. Parque de la Naturaleza de Cabárceno
  9. Bosque de Secuoyas
  10. Laberinto de Villapresente

 

Explora la diversidad cultural y natural de Santander con nuestra guía de cosas que hacer en Santander.

Más allá de su impresionante escenario marítimo, Santander invita a los visitantes a disfrutar de apacibles paseos a lo largo de sus numerosas playas y a deleitarse con la exquisita oferta gastronómica que la caracteriza.

Visitar Santander siempre es una buena opción para quienes buscan fusionar el encanto de su paisaje costero con la riqueza cultural de una ciudad que te invita a explorar sus tesoros históricos y disfrutar de experiencias inolvidables.

Si buscas una guía de  sitios para visitar en Santander has llegado al sitio indicado. Sigue leyendo para descubrir que ver en Santander y alrededores que merezca la pena.

Playas de la Costa Quebrada

 

Descubre la magia geológica al aire libre de la Costa Quebrada, una lección visual que nos transporta a 125 millones de años atrás. Este tramo costero se compone de estratos fósiles que narran la fascinante historia geológica de aquel periodo. Considerado como un rincón secreto paradisíaco, la Costa Quebrada se destaca como la joya más hermosa del litoral cántabro.

Conformada por impresionantes acantilados, playas salvajes y un mar enérgico como ningún otro, estos 10 kilómetros de costa se presentan como un paraíso para los amantes del mar y aquellos que buscan playas de ensueño.

La mejor manera de explorar este tesoro costero es en coche, ofreciendo la libertad necesaria para desplazarse entre las playas.

La proximidad de muchas de estas playas entre sí añade un atractivo adicional a esta cautivadora región.

Ubicación:

Monte La Picota

 

Situado en la majestuosa Sierra de Liencres, en el municipio de Piélagos, se encuentra el encantador Monte La Picota. Aunque su altitud no supera los 240 metros sobre el nivel del mar, desde su cima se ofrecen vistas panorámicas incomparables del litoral cántabro.

Lo que hace que el Monte La Picota sea verdaderamente especial es su privilegiada posición que brinda una perspectiva excepcional de la Desembocadura del Río Pas, el pintoresco campo de golf del Abra del Pas, el cautivador Parque Natural de las Dunas de Liencres y la inigualable Playa de Valdearenas, considerada por muchos como la mejor playa de Cantabria.

Sumado a estas vistas espectaculares, el Monte La Picota se enclava en un entorno incomparable, a proximidad de la Costa Quebrada.

Ubicación:

Monte de Peñacabarga

 

Peña Cabarga se erige como el monte más distintivo de Santander, destacándose fácilmente desde la bahía gracias a la presencia imponente de la Cámara Oscura, conocida localmente como el "pirulí blanco".

Este macizo kárstico alberga en su cima el pico más elevado, llamado Llen, con una altitud de 569 metros, una ascensión que resulta perfectamente asequible a pie y que brinda como recompensa una vista panorámica de Cantabria en 360 grados.

La experiencia de subir Peña Cabarga no solo permite contemplar la majestuosidad de la Bahía de Santander, sino también disfrutar de la visión de la desembocadura de la ría de Solía y los imponentes Picos de Europa.

Esta ruta se destaca como una de las doce sendas de Interés Natural en Cantabria Oriental, ofreciendo a los amantes de la naturaleza una oportunidad única para explorar y apreciar la belleza de esta región desde las alturas.

Ubicación:


Playa del Puntal 

 

Ubicada en el pintoresco municipio de Ribamontán al Mar, en Cantabria, la Playa del Puntal se revela como una auténtica maravilla natural. Estratégicamente situada en medio de la bahía de Santander, esta playa se distingue por ser un saliente de arena que acoge las aguas por ambos lados, creando un entorno único.

Con una extensión de 2.5 kilómetros, la Playa del Puntal se destaca como una de las más espectaculares de la Comunidad de Cantabria. Desde la localidad de Somo, se puede acceder a pie a esta inmensa playa, y es imprescindible dar un paseo por toda su extensión para disfrutar de las maravillosas vistas que ofrece hacia la bahía de Santander.

La Playa del Puntal permite dos formas de acceso, ya sea a través de una agradable caminata desde Somo, a la que pertenece, o en barca desde la bahía de Santander, un viaje que ofrece una experiencia única y que dura aproximadamente 10 minutos. De cualquier manera, la visita a esta playa es altamente recomendada, ya que cuenta con una gran reputación y vistas prácticamente inmejorables.

Esta extensa playa de arena dorada y fuerte oleaje es conocida por ser un lugar de práctica nudista, convirtiéndola en una de las playas más libres y naturales de Cantabria.

Ubicación:


Playa de Langre

 

La Playa de Langre, en Ribamontán al Mar, Cantabria, se destaca como una de las joyas costeras más impresionantes de la comunidad. Rodeada por un entorno montañoso encantador, su espectacular acantilado y alto valor ecológico la convierten en una visita esencial para los amantes del mar.

Comparte su encanto con otras playas cercanas, como Somo y Loredo, pero se distingue por sus fuertes corrientes y vientos, atrayendo a surfistas en busca de emociones fuertes en el Cantábrico.

Esta extensa playa, desprovista de equipamientos, preserva su carácter natural y salvaje, y se accede a través de la colindante Langre II, facilitando a los visitantes la inmersión en este paraíso costero

Los entusiastas del snorkel encontrarán una experiencia única explorando la zona rocosa en el extremo occidental de la playa, mientras que los pescadores de caña descubrirán una riqueza de fauna marina en estos fondos.

Ubicación:


Santillana del Mar y el Museo de la Cueva de Altamira

 

Santillana del Mar, conocida como uno de los pueblos más pintorescos de España, cautiva a sus visitantes con su encanto medieval. El deleite de pasear entre casonas montañesas y calles empedradas es solo el comienzo de la experiencia que aguarda en esta villa histórica. Entre los lugares destacados se encuentra la Cueva de Altamira, considerada la joya del arte rupestre paleolítico a nivel mundial.

Descubierta en 1875 por Marcelino Sanz de Sautuola, abuelo de Emilio Botín, esta cueva es conocida como la Capilla Sixtina del Arte Rupestre.

La Cueva de Altamira alberga testimonios de nuestros ancestros que datan de hace 36,000 años, convirtiéndola en un fascinante viaje a través del tiempo.

Su característica más distintiva es el techo de la sala de los polícromos, declarado Patrimonio de la Humanidad. Aquí, bisontes pintados en pigmentos rojos y negros difuminados hace 14,500 años crean un panorama único e inigualable en el mundo, ofreciendo una ventana extraordinaria al pasado prehistórico. 

Ubicación:

Cuevas de Puente Viesgo

 

Las Cuevas de Puente Viesgo, destacadas en el Monte Castillo junto al río Pas, han sido visitadas por humanos durante 150,000 años. La Cueva de El Castillo, en particular, es objeto de significativas investigaciones arqueológicas, brindando conocimientos detallados sobre la Prehistoria en el sudoeste de Europa.

Con un depósito estratigráfico de 20 metros, la cueva revela aspectos ambientales, anatomía humana, tecnología y vida social a lo largo de milenios.

En su interior, la cueva exhibe uno de los conjuntos rupestres más notables de la Prehistoria europea, representando el origen del pensamiento simbólico y artístico del Homo sapiens en Europa.

Diversas figuras animales y representaciones humanas, ejecutadas con diversas técnicas, pinturas y grabados, ofrecen una ventana única al pasado creativo y técnico del Paleolítico superior.

Ubicación:


Parque de la Naturaleza de Cabárceno

 

El Parque de la Naturaleza de Cabárceno, en España, es una transformación de una antigua explotación minera en un espacio naturalizado de 750 hectáreas.

No es un zoológico convencional, permitiendo que la vida de los animales se desarrolle con casi total libertad e instinto, excepto en la alimentación proporcionada. Sus instalaciones, reconocidas internacionalmente por su calidad, lo han convertido en un destacado atractivo turístico en el norte de España.

Con más de 20 kilómetros de carreteras que atraviesan desfiladeros y lagos, ofrece experiencias únicas y cuenta con diversas instalaciones recreativas y servicios, haciendo que sea ideal para pasar el día en familia.

Ubicación:


Bosque de Secuoyas

 

El Bosque de Secuoyas del Monte Cabezón, ubicado cerca de Cabezón de la Sal en Cantabria, sorprende con dos hectáreas y media de secuoyas en un entorno poco convencional para esta especie. Aunque las secuoyas son comunes en la Costa Oeste de Estados Unidos, en Cantabria se plantaron alrededor de 1940 por necesidades industriales de la zona durante la época del franquismo.

La decisión de plantar 848 secuoyas se basó en la rapidez con la que estos árboles crecen, permitiendo aprovechar la madera localmente y reducir la dependencia de materias primas externas.

A pesar de los planes iniciales, las secuoyas no fueron taladas cuando crecieron, y se quedaron plantadas en el Monte Cabezón. Este bosque inusual y sorprendente es ahora un tesoro natural que podemos disfrutar, proporcionando una experiencia única en la región cántabra.

Ubicación:


Laberinto de Villapresente

 

El Laberinto de Villapresente, el más grande de España, situado cerca de Santillana del Mar, es un plan ideal para familias en Cantabria. Inaugurado en 2017, este laberinto de cipreses de 5,623 metros cuadrados, diseñado por Emilio Pérez, ofrece diversión para todas las edades.

Inspirado en los jardines ingleses del siglo pasado, este proyecto personal se ha convertido en un atractivo turístico, proporcionando 90 minutos de entretenimiento mientras se intenta llegar al centro y salir. A pesar de su tamaño, el laberinto cuenta con personal amable que brinda asistencia y garantiza una experiencia agradable y segura para los visitantes.

Ubicación: