Apicultores de Liébana protegen sus colmenares para prevenir daños de oso

El Fondo para la Protección de los Animales Salvajes (FAPAS) está desarrollando en la comarca de Liébana unas jornadas de prácticas con apicultores para prevenir daños de osos en los colmenares.

Se trata de una primera jornada de trabajo desarrollada por la ong FAPAS, en el marco de una campaña que está llevando a cabo con apicultores de varias comarcas de León y Cantabria en zonas de mayor presencia osera, ha indicado en nota de prensa.

La entidad conservacionista ha señalado que "la gran mayoría" de los colmenares que están en zonas oseras "no se encuentran adecuadamente protegidos" y la información que poseen los apicultores en gran parte de los territorios donde hay osos "no es adecuada" para instalar sistemas de protección que eviten los daños.

Según ha apuntado, actualmente hay una "gran confusión" entre los apicultores sobre los métodos a utilizar para evitar los daños de los osos a las colmenas, métodos que "no siempre son llevados a cabo correctamente" y que "no impiden que los osos accedan al interior de los colmenares y destrocen las colmenas".

Asimismo, el FAPAS considera que las campañas de apoyo a los apicultores mediante la concesión de subvenciones para adquirir pastores eléctricos "no alcanza la efectividad deseada", manteniéndose los "importantes daños" que los osos causan en ocasiones a la apicultura.

A su juicio, la prevención de los daños evitando llegar a situaciones que ponen en riego a la apicultura de montaña "debería de ser una línea de trabajo prioritaria que no está siendo tenida en cuenta de manera eficaz, orientando el apoyo a la apicultura a la concesión de ayudas e indemnizaciones una vez que los daños ya han sido causados".

De esta forma, la campaña de apoyo a los apicultores que lleva a cabo el FAPAS pretende anticiparse a los daños mejorando los sistemas de prevención, lo que está "haciendo compatible ya en muchas zonas" de la Cordillera Cantábrica, ha asegurado, la presencia osera con el desarrollo de la apicultura.

"El incremento de la población osera en la Cordillera Cantábrica se hace más evidente también por las reclamaciones de los daños que estos animales causan a la apicultura. Aprender a proteger adecuadamente los colmenares es clave para evitarlos", ha sentenciado.